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Mostrando entradas de abril, 2008

Los versos misteriosos de Rubén Darío

Al inicio de la década del setenta, vivía yo en una inmensa casa blanca que hacia esquina en la intersección de la diecinueve avenida sur y la calle Arce de San Salvador. La casa era ocupada por clínicas privadas de renombrados médicos de esa época, de entre los que recuerdo ahora los nombres de Carranza Amaya,- que me regalaba dulces llenos de su inmensa sonrisa-; Flores Hidalgo- eminente pediatra que me salvó de la muerte segura a la que me llevaba la fiebre tifoidea-, Ernesto Núñez,- quien le encargó al doctor Flores Hidalgo el cuido post-natal de mi madre biológica y me obsequió la cuna usada por sus hijos para que yo durmiera-. Al resto de médicos que tenían sus clínicas allí, no los logro recordar, quizás, porque no tuvieron un trato tan cercano como estos últimos hacia con mi familia y conmigo mismo. Mi madre de crianza, había trabajado desde hace muchos años como hacedora de oficios domésticos en la residencia personal del doctor Ernesto Núñez, quien rentaba esa inmensa casa do

"Llegó con tres heridas: la del amor, la de la muerte, la de la vida"

"Con tres heridas yo, La del amor La de la muerte La de la vida." Miguel Hernández Compromiso Quiero luchar esta batalla. Quiero dar todo de mí en esta lucha que ahora empiezo. Quiero intentar alcanzar la estrella que más brilla. Quiero llegar tan lejos como pueda siguiendo este horizonte. ¡Quiero alcanzar tu corazón a toda costa! Quiero ver el fin de este camino. No sé, si he de llegar a lo que espero. Es posible que quede en medio de la lucha, tirado en el campo de una gesta imposible. Quizás alguna lanza de olvido, alguna flecha de desdén, algún dardo de hielo llegue hasta mi pecho… y la batalla termine para mí. Y todo quede en el intento. Pero esta es la lucha que yo quiero. Pero esta es mi batalla, Pero esta es la batalla, que hoy, yo, he escogido, Quiero dar todo en el intento, Auque me quede en medio del camino. Melancolía Es de noche, casi media noche. Mi mano me pide que la avance, mi corazón me pide que lo siga. Es de noche, casi media noche. Tu fantasma anda por